Ópalo
El ópalo o opal, es un mineraloide, de la familia de los silicatos, que esta relacionado cuarzos, aunque no sea propiamente un cuarzo. El ópalo se caracteriza por la astillabilidad y el brillo.
Ópalo es un mineral amorfa o sílice hidratada, o lo que es lo mismo, está compuesto de dióxido de silicio al igual que el cuarzo y otros minerales relacionados.
El Ópalo está compuesto por diminutas lepisferas formadas por capas que se suceden de cristo-balita y tri-dimita, dos minerales que pertenecen a la clase de los silicatos que coincidente con el cuarzo en composición, pero que difieren de él por sus respectivas estructuras cristalinas, unas partículas microscópicas que tienen un diámetro de aproximadamente 0,1 um 1/10000 de milímetro y se encuentran como estructuras empaquetadas en un enrejado tridimensional que lo hace tan bello y, que debido a ese preciso original enrejado, es la única gema conocida capaz de reflectar los rayos de luz y transformarlos en los básicos colores del arco iris, desde el rojo hasta el violeta.
El Ópalo a diferencia de otras gemas, el efecto reflector del no se debe a sus impurezas, sino a la penetración de la luz a través de unos espacios llamados vacíos o que están entre las esferas.
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